<<Nos cogemos de la mano, mientras descanso mi cabeza
en tu hombro y sonrío, sonrío mucho, pensando en todas esas pequeñas cosas que
me gustan tanto de ti. Como ese hoyuelito que se te forma cuando sonríes o esa
manera que tienes tan divertida de buscar mis ojos, para que se encuentren con
los tuyos, o esa voz que tanto me gusta cuando me susurras que me quieres al oído,
susurros que hacen que todo mi cuerpo se estremezca. Todas esas pequeñas cosas
son las que hacen que un rato contigo sea tan especial que ni yo misma sé
explicar, como la mayoría de mis sentimientos hacia ti.
Creo que la gente no se hace ni una idea aproximada de lo
mucho que te quiero, pero, ¿sabes qué? Me importa más bien poco, porque creo
que tú y yo lo sabemos bien y creo que te demuestro día a día que me encantas
tú y tus pequeñas cosas, tus pequeñas cosas especiales, fantásticas y
queribles. No sé ni si quiera si esa palabra existe, pero mira, ya tienes un
adjetivo más que añadir a la lista de adjetivos que te describen. Y son muchos.
Me gusta quererte así, me gusta echarte de menos, me gusta
cada centímetro de tu piel, me gusta sentirte cerca y saber que te tengo, me
gusta necesitarte, me gusta que me dejes sin aliento con una palabra, me gusta
todo, absolutamente todo de ti y creo que te conozco de toda la vida. Increíble,
¿no crees? >>.