lunes, 26 de mayo de 2014

Con las ganas.

Algo ha cambiado. Tú. Yo. No sé. Pero de querer pasarme las horas mirándote a esquivarte hay un cambio. Y está pasando.
Me pregunto que ha pasado. Aunque en realidad prefiero dejarlo así. Queda poco para perdernos de vista y casi necesito que esto suceda.

Los cosas vienen y van y tan pronto viniste, tan pronto te has ido.
Me quedo con ganas de decirte un millón de cosas, sí,  pero fingiré que no me gusta estar contigo.

domingo, 25 de mayo de 2014

Sometimes II.

<<-¿Estás bien?
-A veces.
Pensé que era una respuesta estúpida a esta pregunta a la que siempre se responde con "sí" o "no" pero luego me di cuenta de que no era como el resto. Nunca lo había sido. Y era interesante. Puede que sea demasiado, que lo analice todo de forma exagerada, pero no, no... Simplemente me interesaba por alguien que merecía la pena.
Estudiaba todo lo que hacía con detalle y me encantaría contaros lo absolutamente increíble que me parecía todo eso, pero ¿sabéis eso de que a veces hay cosas que no se pueden explicar? Pues eso lo aplico a esto.
Y tengo en mi cabeza un millón de fotos mentales que he tomado de aquella persona tan ¿mágica?

Quizá sea excederse un poco y quizá me esté pasando y esté poniendo a alguien tan por las nubes, que quede como una loca... Quizá, pero me da igual. Me gusta observar, analizar, admirar.>>

Sometimes.

<<-¿Estás bien?
-A veces.>>
"A veces". Repetí esa palabra en mi cabeza todo el día.
A veces estaba bien, a veces venía, a veces quería, a veces odiaba, a veces sentía, a veces reía, a veces, a veces, a veces...
Me di cuenta de que, es imposible estar siempre de una forma, siempre estarás en un estado de "a veces".


Tu risa.

No hay mejor sensación que la de reírse.
La risa es provocada por muchas cosas, por una situación incómoda en la que solo te sale reír de lo patético que está resultando todo; por incredulidad, de esto que te cuentan algo y no te lo crees, te parece tan surrealista que piensas, mejor me río porque vamos... O cuando te tienes que disfrazar para algo y te ves tan horrible que te ríes de ti mismo; por ver como un amigo tuyo se cae estando borrachos; por un chiste malo; o simplemente por el hecho de que te acuerdas de algo y lo revives tanto que acabas descojonandote...

Pero sin duda alguna, lo mejor es aquella carcajada que te sale cuando escuchas la risa de alguien, te ríes solo por ver a la otra persona reír. Risa por risa. 
Lo mejor de alguien es la forma de reírse. 

Hay todo tipos de risas. Silenciosas, escandalosas, con un cierto toque de maldad, de esas que acabas hiperventilando, contagiosas, con sonido animal, repetitivas... 
Me encanta fijarme en la risa de una persona, es como un signo de identidad y es algo único, personal e intransferible de cada uno. Es mágico. 

jueves, 22 de mayo de 2014

Ansiedad.

Eran las dos de la mañana y no entendía cuándo había llegado hasta allí.
Me condujeron a una sala enorme con una mesa larga en el medio,blanca, con la luz de los fluorescentes parpadeando. Cuando entré me derrumbé al ver allí sentados a mis primas con sus parejas y a mis tíos con una expresión en la cara de estar completamente ausentes. Me senté en una silla y esperé no sabía bien  qué. Pasaron lo minutos que parecieron horas en aquella sala dónde solo se escuchaban los sollozos silenciosos de mi prima sobre el hombro de su novio y los pasos de un lado a otro de mi tio, nervioso cuando una enfermera entró y nos dijo con tono triste: <<pueden pasar a verla si quieren antes de que la bajemos...>> Mi otra prima me cogió la mano y me preguntó que si quería ir a verla y respondí un inaudible "sí" ahogado. Fui sola, con la respiración acelerada. Descorrí la cortina que separaba un cubículo de otro de la habitación y comenzaron a brotar de mis ojos un mar de lágrimas que me mojaban el cuello de la camiseta y el corazón me dio un vuelco cuando vi su cuerpo inerte sobre la cama. Parecía que estaba dormida. Con la boca entreabierta y el pelo despeinado, con la cabeza girada hacía un lado... No podía estar pasando aquello. No. Noté como las piernas me fallaban y me arrodillé junto a la cama, sollozando en alto. Le dije a su cuerpo sin vida que por qué, que volviera, la agarré la mano y supliqué que despertara. Después de un rato, me aproximé a su mejilla y la besé. Me sorprendió lo fría que estaba. Completamente helada. Salí al pasillo, sin haber parado de llorar y  entré en la sala de nuevo...



Me desperté sollozando como si algo me doliera. Miré el reloj y eran las tres de la mañana. No dejaba de repetirseme el mismo sueño una y otra vez desde que todo aquello pasó. Tengo miedo de dormir. No duermo por las noches y por las mañanas me sumerjo en clases vacías, sintiéndome a cada cual peor y más pequeña. Me ahogo. Me agobio. No puedo con nada de esto. Dicen que el tiempo todo lo cura pero el tiempo va demasiado lento y a mi no me gusta esperar.

miércoles, 21 de mayo de 2014

Una y otra vez

Cierro los ojos, cansada después de un día largo y ahí está. Una incontrolable lluvia de imágenes y sonidos vienen a mi mente y me atormentan cada noche.
Cierro los ojos con miedo a verlo todo de nuevo. "No quiero verlo más" pienso, "para por favor" me digo a mi misma e intento pensar en otra cosa pero no puedo, no puedo, me aparece su cara, su risa, todo y no puedo, me aterroriza cerrar los ojos, me aterroriza quedarme sola porque estando sola es cuando todo eso aparece.
Tengo miedo de dormir, de soñar, de olvidar...

lunes, 19 de mayo de 2014

Como la vida misma...

Somos tan solo un recipiente vacío, esperando que algo o alguien venga y nos enseñe todas aquellas cosas con las que nos podemos llenar. Vivimos en una continua espera, que poco a poco nos consume porque no llegamos a entender del todo, a qué hemos venido, cuál es nuestro propósito, para qué servimos...
Unos destacan y otros no, pero al fin y al cabo todos acabamos atrapados en una rutina de la que no sabemos salir.
Cuando pienso todo esto siempre termino llegando a la misma conclusión y es que el hecho de no saber nada, hace la vida más interesante, porque se supone que es un misterio que cada uno debe resolver a su manera.

domingo, 18 de mayo de 2014

Cambios.

Dijimos que nunca bajaríamos, que estaríamos siempre en lo alto y que si alguien caía, bajaríamos y subiriamos de nuevo. Y parece que todas esas promesas y todas esas ganas de vernos y emborracharnos han desaparecido como una ola estrellándose contra un acantilado. Tan pronto viene, tan pronto se va. Derepente sucedió y a la nada pasó.

sábado, 17 de mayo de 2014

Valiente.

Soñé que estabamos en lo alto de una montaña rusa, en tensión, aprentando fuerte el manillar y justo antes de que callesemos en picado dirección a un lupping, te miré, con los ojos cargados de adrenalina a punto de estallar y te dije esas dos palabras que tanto temía decirte. Y me besaste, con miedo al principio pero fue un beso seguro. Me besaste justo antes de perdernos en un mar de curvas, de baches, de velocidad, de subidas y bajadas.

Microcuento.

Te vi pasar delante de mí fugazmente, sonreír, reír y pedí un deseo. Y se hizo realidad.

martes, 13 de mayo de 2014

Que no sé..

Me gustaría escribir tantas cosas que, joder, maldita sea, ¿dónde están las palabras cuándo las necesitas? Se las han llevado y me han dejado muda. Veo piezas de mi vida que no encajan, como cuando juegas al Tetris por primera vez, y me desespero pensando en cómo coño poder colocar todo aquello que al parecer no es importante, pero que seguro que algún día lo será. Tengo el síndrome de Diogenes total.

domingo, 11 de mayo de 2014

Feel it.

Que una persona no llore no significa que no esté triste o no le afecte lo que pase. Que una persona no se ría a carcajadas no significa que no le haya hecho gracia algo o que no sea feliz. Que una persona bese a otra persona no significa que la quiera. Que una persona abrace ni significa que sienta lo que ese abrazo conlleva. Que una persona insulte no significa que odie. Que una persona corra no significa que esté huyendo de algo.
Cada uno siente a su manera. Cada uno tiene una forma diferente de demostrar su pena, su alegría, su amor, su odio...
Y muchos se esconden detrás de una fachada para que el resto no vea cuál es su manera verdadera de sentir.

jueves, 8 de mayo de 2014

Introduce un título...

Mi abuela siempre me decía cuando la iba a visitar que la vida es demasiado corta para pasarla sentado, pensando, llorando. Siempre se reía cuando me lo decía y me agarraba la mano y me decía: "tu siempre sonríe, hasta a aquellos a los que caigas mal, sonríe siempre y si tienes que llorar, llora cielo, llora, pero hasta en ese momento de pena, sonríe. Puedes perderlo todo, pero la sonrisa es lo ultimo que tienes que perder, ¿entendido?" Y yo la sonreía y la daba un beso.
Era entonces cuando me daba cuenta de que su sonrisa era lo único que no quería perder de vista nunca. Porque me hacía feliz hacerla feliz.
Una vez un amigo me dijo:Ojalá los abuelos fueran eternos. Y que gran verdad, no?

jueves, 1 de mayo de 2014

Introducción.

No sabía cómo había llegado hasta allí. Simplemente había cogido un montón de cosas, las había metido en una mochila vieja y se había ido, sin despedirse de nadie, una noche de Mayo. ¿Dónde? No le importaba, solo quería irse cuanto antes de aquella ciudad que apestaba a recuerdos y sal.
Tenía dinero y muchas ganas de cambiar de vida, de gente y de identidad. Hasta ese momento había vivido siempre según las normas de todos los demás y ya se había aburrido. Necesitaba darle un giro completo a todo su mundo sin preocuparse por las consecuencias.
Y allí estaba, observando todo lo nuevo que le rodeaba tras los cristales de sus gafas de metal ya algo desgastadas. Eso también tendría que cambiarlo.
Antes dije que se había ido sin despedirse de nadie y no es del todo cierto, si que hubo alguien de quien se despidió, indirectamente...
-Podríamos irnos. No pintamos ya nada aquí.
-¿Sí, no?
-Claro, joder! Aunque bueno, si no vienes conmigo, me iré yo.
-Quizá dentro de un tiempo sí, pero ahora, ¿por qué?
-Porque estoy aburrido. Eres mi mejor amigo, Iván, ven conmigo.
-No digas bobadas. Venga, te invito a otra cerveza.
El tema quedó en el aire y al día siguiente, Luca Stoner se marchó sin mirar atrás.
Seguramente ahora, su amigo, Iván Flammes, estaría riéndose irónicamente porque se estaría arrepintiendo por no haberse ido con él cuando tuvo oportunidad. Pero Luca sabía que Iván pronto dejaría de preocuparse por él, porque tanto Luca como Iván sabían que se había quedado por ella. "Siempre pensando en los demás en lugar de en lo que realmente quieres, ¿eh, amigo?" Pensó Luca mientras salia de la estación de trenes...