jueves, 26 de febrero de 2015

Te odio-Los Seis Días y Santi Balmes.


Te odio, por como te fuiste sin mayor explicación.
 Te odio, por como no quisiste dejar que lo arreglara. 
Te odio, por no querer escuchar mis disculpas. 
Te odio, por no poder reír contigo más. 
Te odio, por los días que estuviste sin estar. Alejándote lentamente, creyendo que no me daría cuenta. Pero lo hice. Y te pregunté. Y simplemente me odiabas. ¿Cómo combatir el odio sin motivo? Me pregunté... Y tú dijiste que era cosa tuya, que se te pasaría. Y pasaban los días y comencé a perder la esperanza.  
Te odio, por hacer que pierda la esperanza. Por dejar que se esfume todo aquello, como el humo de ese tren que ya no podremos tomar para huir a ninguna parte. 
Te odio, por tu boca por la que ya no salen palabras hacía mí. 
Y sigue así...
Te odio, como nadie en este mundo te odiará.
Te odio, como no quiero odiar a nadie más.
Te odio, porque siempre sigues, siempre sigues, siempre sigues ahí. Te odio, porque la angustia crece en mi y tengo el corazón a punto de estallar.

Al respirar.

Duele tu ausencia. Y tus abrazos por la mañana. Duele todo. Y llueve afuera y llueve dentro. 
Dicen que no vale la pena pero cada día me cuesta más creerlo.
Me siento sola. Me despierto queriendo escapar para no tener que encerrarme seis horas con la angustia creciendo a cada minuto en mi interior. Cuesta caminar, pensar, escribir, atender a lo que los profesores dicen. 
Nada volverá a su cauce. Ni ahora ni nunca. Y duele la pérdida. La ausencia de personas que creías que se quedarían mucho más. 

martes, 24 de febrero de 2015

Tristeza, los amigos que perdí-Dorian.

Cómo duelen los sueños cuando no se cumplen, como cuando te vas sin avisar y no puedo hablarte una vez más.
Pero yo quiero que dejes que haga que tus dudas dejen de agobiarte. Aunque siempre te cierras a mí y se hace complicado. 
Y la tristeza que llevo dentro hace que no sepa explicarte cuanto lo siento. Y es que se acaba el tiempo y todas mis palabras se las lleva el viento y tú te vas con el.
Todo lo que éramos arde, todo se consume poco a poco. Quiero desarmarte para que puedas quedarte y dejar que te hable. Entonces salí
 en busca del tiempo perdido siguiendo el rastro de los recuerdos que fuiste tirando. Y me junte con gente que no podían compararse a ti y a tu don para hacerme reír como solías hacerlo. Y muchos me dieron clases para aprender a ver todo lo malo de ti. Y me hablaron del dolor y de que no merecía la pena. Que no debías importarme. Pero lo hacías. Vaya que si lo hacías. No sabía como cambiar eso para dejar de angustiarme cada día. Intentaron extirparme el dolor y el mal sabor que dejaste en mi garganta. Sin resultado ya que lo único que pondría orden a aquel desorden era dar marcha atrás y no cometer tantos errores que ya empezaban a pasar factura. Me dijeron entonces que no debían dolerme los amigos que perdí porque ganaría otros con el tiempo... Fue cuando me especialice en noches suicidas, confundiendo molinos con gigantes después de días sin dormir. Entonces escuché una canción que decía: "La venganza una flecha clavada, no hay nada más inútil que el odio, no hay nada más doloroso que el rencor" e intenté poder hacerte ver cuanta razón llevaban aquellas palabras... Pero no me atreví. No quise arrastrarme hasta ti de nuevo. Igual yo cometí errores, pero tu te portaste mal conmigo también.



  

 

 
 


domingo, 22 de febrero de 2015

Fix me.

Soy una suicida emocional. Me torturo mirando tus fotos, los vídeos, leyendo conversaciones en las que reírnos era lo único que nos preocupaba. Pero entonces paf. De un día para otro todo se oscureció. Te marchaste sin avisar. Sin dejar que me preparase para la caída. Y caí demasiado deprisa y no pude prepararme para el golpe que me reventó el cuerpo. Y ahora te paseas riéndote con otros y con otras mientras yo me quedo atrás porque no puedo seguirte, porque no quieres que esté ni ahora ni nunca. Nunca. Que fuerte suena eso, ¿no? Más fuerte me sonó a mi cuando me lo dijiste. Pero supongo que de eso trata la vida... Unos vienen y otros van. Y si has decidido bajarte de mi autobús ahora, es problema tuyo... Sabes que cuando quieras podrás volver a subir. Porque yo siempre perdono todo el daño que me hacen. Aunque yo también haya metido la pata la que siempre sale sufriendo soy yo. Que irónico. 

martes, 17 de febrero de 2015

Somebody that I used to know.

Ahora y entonces pienso en cuando éramos grandes amigos. 
Como cuando decías que era de las pocas personas con las que te reías así. Y me decía a mí misma que eras de lo mejor que tenía. Pero entonces empecé a sentirme tan sola en tu compañía que me empecé a dar cuenta... Pero eras importante y era algo, era y es un dolor que todavía recuerdo. 
Puedes volverte adicto a cierto tipo de tristeza, algo parecido a resignarte a que el final, siempre es el final. Así que cuando supimos que podríamos no estar bien siendo lo que éramos dijiste que seguiría todo igual, que no me preocupase, que ya se te pasaría. Y es que es raro, pero admitiré que me dio cierta felicidad saber que todo había terminado porque al fin y al cabo con todas esas ultimas semanas tan raras, sabíamos que nada bueno vendría después. Y que aunque tuvimos también esas semanas tan buenas, con tanta confianza y cariño, demasiado raro me parecía que fuera todo tan bien... Pero... ¿Buscaste una excusa para hacerme eso o simplemente fue porque me odiaste de verdad?
Y es que en realidad no tenías por qué dejar de hablarme y hacer como si lo nuestro nunca hubiera pasado
y que no fuimos nada, que no te importó y que todo fue malo. Y no pienses que necesito tu cariño, pero me tratas como a una extraña y eso me revienta. 
No, no tenías por que irte sin dejar rastro, ¿es que acaso tus amigos guardan cada foto y cada carcajada 
y luego cambian de número? Supongo que no necesito hacerlo, pero parece como si ahora fueras alguien a quien solía conocer. 
Ahora y entonces recuerdo todas esas veces en las que no parabas de joderme y me hacías creer que era siempre algo por culpa mía y yo ya no quiero seguir así... Leo cada palabra que me dices con ese odio que aún no alcanzo a comprender porque parece que en el fondo dices que harás algo para dejar de hacerlo. 
Y jode ver como ahora somos alguien a quien solíamos conocer... 

Nunca es tarde.

Te dejas la piel en alguien que no va a valorarlo. Al menos hasta tiempo después, cuando ya no te interesa de esa forma. Y piensas: "joder, ¿por qué fuiste tan idiota y no supiste verme antes?" Entonces te da rabia, pero luego sonríes y te alegras de que al menos al final ha sabido verlo. Mejor tarde. Así aprendemos. 

martes, 10 de febrero de 2015

Tú.

Los pasillos y tú. 
Las miradas clandestinas y tú. 
Las sonrisas que se escapan y tú.
Los abrazos en el momento justo y tú
Soñando con verte un poco más.
Buscarte y encontrarte. Porque estás. Y qué suerte tenerte. 

lunes, 9 de febrero de 2015

Lunes.

Nos pasamos la mayor parte del tiempo imaginando situaciones, sin prestar atención a lo que estamos viviendo en ese instante. Me atrevería a decir que muchas veces el pasado nos consuela de ese futuro que tanto nos aterra. Aunque ese futuro es el que tanto anhelamos, por el que se supone que estamos luchando cada día. Pero nosotros seguimos aferrándonos a aquello que perdimos sin valorar lo que tenemos. Entonces, para un momento y piensa que en el fondo esta vida esta llena de contradicciones y nosotros somos la primera contradicción universal por excelencia. El ser humano es incoherente, imperfecto y esta lleno de inseguridades y miedos. Somos así y no hay manera de cambiarlo.